Qué son las emociones
Hay una regla general en psicología según la cual lo que resistimos, persiste y se amplifica. Si tratas de bloquear una emoción negativa, como la ira, el miedo o la tristeza, para evitar sentirla, generalmente descubrirás que atraviesa ese bloqueo y aumenta su intensidad y duración.
Es totalmente comprensible que queramos evitar las emociones negativas: son una forma de dolor y, como animales, estamos programados para evitar el dolor. Por desgracia, esto puede llevarnos a tener miedo de nuestras propias emociones o a sentirnos perturbados por ellas.
Cuando tratamos de combatir o evitar las emociones negativas, tendemos a ponernos ansiosos por estar ansiosos, enfadados por estar enfadados y molestos por estar molestos. De este modo, hemos duplicado la emoción original y nos encontramos en un estado emocional aún peor.
No hay que tener miedo a las emociones negativas, ya que no pueden hacernos ningún daño a largo plazo. Estar molesto o ansioso está bien. De hecho, estas emociones están haciendo un trabajo muy importante: son una forma de motivación, motivándote a tomar medidas para que puedas estar seguro ahora y prosperar en el futuro.
Afectividad negativa
En estos momentos difíciles, a menudo queremos escapar del dolor, ahogarlo o alejarlo de alguna manera. Puede que empecemos una lucha mental con el dolor, tratando de hablar mentalmente para salir de él, o que nos distraigamos con actividades o lo ahoguemos con comida o bebida o algo más fuerte.
En lugar de “alejarnos” del dolor para evitarlo, podemos aprender a “acercarnos” suavemente a lo que estamos experimentando. Podemos prestar una atención abierta y afectuosa a las partes heridas de nosotros mismos y tomar decisiones sabias sobre cómo responder a nosotros mismos y a la vida.
Una vez que hayas tomado conciencia del sentimiento, detente un momento. Respira profundamente y luego “siéntate” con la ira, la vergüenza, la culpa, la ansiedad, la frustración o el miedo. No lo inhibas, ni lo reprimas, ni lo ignores, ni intentes conquistarlo. Simplemente acompáñalo con una actitud de curiosidad y aceptación abiertas.
Cuando te sientas avergonzado, o sientas otra emoción negativa, no necesitas negarla. Puedes aceptar lo que está presente. En su libro “La paz está en cada paso”, Thich Nhat Hahn sugiere que podemos reconocer mentalmente ante nosotros mismos… “Puedo aceptar que estoy experimentando una intensa vergüenza en este momento”.
Autocontrol emocional en el trabajo
Algunas emociones son positivas. Piensa en la felicidad, la alegría, el interés, la curiosidad, la excitación, la gratitud, el amor y la satisfacción. Estas emociones positivas nos hacen sentir bien. Las emociones negativas -como la tristeza, la ira, la soledad, los celos, la autocrítica, el miedo o el rechazo- pueden ser difíciles, incluso dolorosas a veces.
Aprender a notar e identificar tus sentimientos requiere práctica. Además de centrarte en tus sentimientos, también debes observar tu cuerpo. Es posible que sientas sensaciones corporales con determinadas emociones; por ejemplo, que se te caliente la cara o se te tensen los músculos.
Una vez que hayas procesado lo que sientes, puedes decidir si necesitas expresar tu emoción. A veces basta con darse cuenta de lo que se siente, pero otras veces querrás hacer algo para sentirte mejor.
A veces, no importa lo que hagas, no puedes deshacerte de una emoción difícil. Si te encuentras atrapado en sentimientos de tristeza o preocupación durante más de un par de semanas, o si te sientes tan molesto que crees que podrías hacerte daño a ti mismo o a otras personas, es posible que necesites ayuda adicional.
Gestión emocional
Los artículos de Verywell Mind son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud mental. Los revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y en caso de actualizaciones sustanciales. Más información.
Amy Morin, LCSW, es la editora en jefe de Verywell Mind. También es psicoterapeuta, autora del bestseller “13 Things Mentally Strong People Don’t Do” (13 cosas que no hacen las personas mentalmente fuertes) y presentadora del podcast The Verywell Mind.
Las emociones negativas son reacciones emocionales desagradables y perturbadoras. Algunos ejemplos de emociones negativas son la tristeza, el miedo, la ira o los celos. Estos sentimientos no sólo son desagradables, sino que también dificultan el funcionamiento en la vida diaria normal e interfieren en la capacidad de alcanzar objetivos.
Es importante señalar que ninguna emoción, incluida la negativa, es intrínsecamente mala. Es perfectamente normal sentirlas en determinados contextos o situaciones. Estas emociones se vuelven problemáticas cuando son persistentes e interfieren con tu capacidad de vivir tu vida normalmente.
