Que es la terapia celular

Que es la terapia celular

Qué es la terapia con células madre

Las nuevas terapias celulares que utilizan las propias células de una persona están abriendo un nuevo potencial en la lucha contra algunos de los cánceres más difíciles de tratar. La terapia celular, que puede consistir en terapias compuestas por células que se inyectan, implantan o injertan para tratar la enfermedad, es una de las varias áreas clave de investigación de Bristol Myers Squibb. En particular, los investigadores están avanzando en la ciencia de la terapia con células T autólogas con receptores de antígenos quiméricos (CAR), un tipo de inmunoterapia contra el cáncer en el que las propias células T del paciente se modifican genéticamente para que reconozcan y se unan a las proteínas que se encuentran en la superficie de determinadas células cancerosas. Como empresa a la vanguardia de la innovación científica, Bristol Myers Squibb está evaluando terapias celulares nuevas y de próxima generación e invirtiendo en tecnología para optimizar el sofisticado proceso de fabricación.

Qué es la terapia celular para el cáncer

Terapia celular T adoptiva. Las células T específicas para el cáncer pueden obtenerse mediante la fragmentación y el aislamiento de los linfocitos infiltrados en el tumor, o mediante la ingeniería genética de las células de la sangre periférica. Las células se activan y cultivan antes de la transfusión al receptor (portador del tumor).

La terapia celular (también llamada terapia celular, trasplante de células o citoterapia) es una terapia en la que se inyectan, injertan o implantan células viables en un paciente con el fin de efectuar un efecto medicinal,[1] por ejemplo, trasplantando células T capaces de luchar contra las células cancerosas a través de la inmunidad mediada por células en el curso de la inmunoterapia, o injertando células madre para regenerar tejidos enfermos.

  Terapia con células t

La terapia celular se originó en el siglo XIX, cuando los científicos experimentaron inyectando material animal en un intento de prevenir y tratar enfermedades[2]. Aunque estos intentos no produjeron ningún beneficio positivo, investigaciones posteriores descubrieron a mediados del siglo XX que las células humanas podían utilizarse para ayudar a evitar que el cuerpo humano rechazara los órganos trasplantados, lo que condujo con el tiempo al éxito del trasplante de médula ósea, que se ha convertido en una práctica común en el tratamiento de pacientes que tienen comprometida la médula ósea tras una enfermedad, infección, radiación o quimioterapia[3]. [Sin embargo, en las últimas décadas, el trasplante de células madre y de células ha cobrado un gran interés por parte de los investigadores como nueva estrategia terapéutica potencial para una amplia gama de enfermedades, en particular para las patologías degenerativas e inmunogénicas.

Para qué sirve la terapia celular

La práctica de la terapia celular se remonta al siglo XIX y sigue ampliándose por motivos de investigación e inversión. La terapia celular incluye terapias basadas en células madre y no madre, unicelulares y multicelulares, con diferentes perfiles inmunofenotípicos, técnicas de aislamiento, mecanismos de acción y niveles de regulación. Siguiendo los pasos de sus terapias celulares predecesoras que se han establecido o comercializado, las terapias celulares en investigación y las exentas de aprobación de mercado siguen proporcionando a los pacientes beneficios terapéuticos prometedores en diferentes áreas de la enfermedad. En este artículo de revisión, delineamos los vastos tipos de terapia celular, incluyendo las terapias celulares basadas en células madre y no basadas en células madre, y creamos la primera compilación en la literatura de las diferentes terapias “multicelulares” utilizadas en entornos clínicos. Además de proporcionar los detalles de las políticas de la FDA que regulan su uso, discutimos los beneficios de las terapias celulares reportados en 3 áreas terapéuticas: medicina regenerativa, enfermedades inmunológicas y cáncer. Por último, contemplamos el reciente cambio de atención hacia los enfoques terapéuticos combinados, destacando los factores que hacen que las terapias multicelulares sean una opción más atractiva que sus homólogas unicelulares.

  Que son las terapias alternativas

Qué es la fabricación de terapia celular

El proceso de cultivo de sus células T en el laboratorio puede durar de 2 a 8 semanas. Durante este tiempo, es posible que reciba tratamiento con quimioterapia y, tal vez, radioterapia para eliminar otras células inmunitarias. La reducción de sus células inmunitarias ayuda a que las células T transferidas sean más eficaces. Después de estos tratamientos, las células T cultivadas en el laboratorio se le devolverán a través de una aguja en la vena.

Los médicos y el personal de enfermería no pueden saber con seguridad cuándo se producirán los efectos secundarios ni cómo le afectarán. Por lo tanto, es importante saber a qué signos hay que prestar atención y qué hacer si empieza a tener problemas.

  Juegos para terapia infantil

La terapia con células T CAR puede causar un efecto secundario grave conocido como síndrome de liberación de citoquinas. Este síndrome se produce cuando las células T transferidas, u otras células inmunitarias que responden a las nuevas células T, liberan una gran cantidad de citoquinas en la sangre.

La terapia con TIL puede causar el síndrome de fuga capilar. Este síndrome hace que el líquido y las proteínas se escapen de los pequeños vasos sanguíneos y fluyan hacia los tejidos circundantes, lo que provoca una presión arterial peligrosamente baja. El síndrome de fuga capilar puede provocar un fallo orgánico múltiple y un shock.

Entradas relacionadas

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.Más información
Privacidad