Dolor muscular
DiagnósticoEl médico le examinará la espalda y evaluará su capacidad para sentarse, ponerse de pie, caminar y levantar las piernas. Es posible que también le pida que califique su dolor en una escala de cero a diez y que hable con usted sobre cómo afecta el dolor a sus actividades diarias.
Estas evaluaciones ayudan a determinar de dónde procede el dolor, cuánto puede moverse antes de que el dolor le obligue a parar y si tiene espasmos musculares. También pueden ayudar a descartar causas más graves de dolor de espalda.
Continúe con sus actividades tanto como pueda con el dolor de espalda. Intente realizar actividades ligeras, como caminar. Deje de realizar actividades que aumenten el dolor, pero no evite la actividad por miedo al dolor. Si los tratamientos caseros no funcionan después de varias semanas, el médico podría recomendar medicamentos más fuertes u otras terapias.
FisioterapiaUn fisioterapeuta puede enseñar ejercicios para aumentar la flexibilidad, fortalecer la espalda y los músculos abdominales y mejorar la postura. El uso regular de estas técnicas puede ayudar a evitar que el dolor vuelva a aparecer. Los fisioterapeutas también le enseñarán a modificar los movimientos durante un episodio de dolor de espalda para evitar que se agudicen los síntomas de dolor sin dejar de estar activo.
Doms
Los dolores musculares pueden afectar a una zona específica del cuerpo o a todo el cuerpo. Los dolores musculares pueden ser leves, graves o intermedios. Pueden ser constantes o aparecer y desaparecer. Si no se tratan, los dolores musculares pueden afectar a su calidad de vida, limitar sus actividades y hacer que otros síntomas o efectos secundarios parezcan peores. Incluso pueden hacer que abandones el tratamiento antes de tiempo.
Su equipo médico también puede recomendarle métodos de autocuidado y apoyo para tratar los dolores musculares. Es posible que decidas llevar a cabo algunos de estos métodos además de la medicación o en lugar de ésta para los dolores musculares leves o moderados. Algunas de estas prácticas puedes hacerlas por tu cuenta. Otras requieren que trabajes con un especialista licenciado o certificado. Hable con su equipo médico antes de probar estos métodos.
Tratamiento del dolor crónico
Cómo tratar el dolor articular y muscular crónicoPara aquellas personas que sufren dolor muscular y articular crónico, la fisioterapia ofrece una de las mejores y más duraderas soluciones de tratamiento.Todos hemos experimentado en un momento u otro, dolor en nuestros músculos, o dolor en una articulación a medida que envejecemos. Por lo general, esto significa un viaje al botiquín en busca de un analgésico de venta libre o una frotación térmica analgésica utilizada para aliviar temporalmente el dolor muscular y articular. Aunque muchos casos son leves, algunas personas pueden desarrollar dolores intensos que pueden repercutir en sus actividades cotidianas y en su calidad de vida.
Hay ciertas afecciones musculoesqueléticas crónicas que requieren fisioterapia. Estas afecciones se caracterizan normalmente por el dolor en las articulaciones y los músculos y pueden estar presentes durante varios años. Algunas de las más comunes son:
Aunque la fisioterapia no puede revertir el proceso de la enfermedad que es el origen del dolor, puede contribuir significativamente a mejorar la calidad de vida que experimentan las personas que viven con este tipo de afecciones crónicas. Los fisioterapeutas pueden diseñar e implementar con sus pacientes, planes de tratamiento que ayuden a aumentar la amplitud de movimiento, la flexibilidad y la fuerza, al tiempo que reducen el dolor en los músculos y las articulaciones.
Tratamiento de la fibromialgia
Sufrir dolores musculares puede ser angustioso y limitar su capacidad de moverse libremente. Casi todo el mundo experimenta dolores musculares de vez en cuando, lo que puede hacer que hacer cosas cotidianas como levantarse de la cama, subir escaleras y levantar cosas sea doloroso.
El dolor muscular suele ser el resultado de un uso excesivo o de una pequeña lesión, tal vez causada por un duro partido de tenis o por un tropiezo o una caída, o por la tensión y el estrés, que pueden hacer que los músculos se vuelvan rígidos y dolorosos.
El dolor muscular, que suele afectar a unos pocos músculos o a una pequeña parte del cuerpo, suele ser consecuencia de un uso excesivo o de una pequeña lesión, por ejemplo, una distensión o un esguince por excederse en la carrera matutina. Los tropezones o las caídas también pueden provocar distensiones y esguinces que causan dolor muscular.
Otra causa frecuente de dolor muscular es el estrés. Esto se debe a que cuando te sientes tenso, tu cuerpo produce hormonas que hacen que tus músculos se tensen y aumenten tu sensibilidad al dolor. Por eso puede dolerte más la espalda después de un día duro de trabajo.
El dolor muscular suele mejorar en pocos días. Para aliviar el dolor puedes recurrir a los analgésicos y antiinflamatorios que te ofrece tu farmacéutico, ya sea por vía oral o aplicados directamente sobre la piel del músculo. Si el dolor muscular se vuelve intenso y demasiado difícil de soportar, un especialista puede ayudarte. Puede aconsejarle que haga ejercicios corporales específicos para rehabilitar el músculo. El médico también puede solicitar pruebas de imagen, como una radiografía, una resonancia magnética o una tomografía computarizada, así como análisis de sangre, para descartar afecciones subyacentes.