Dioses griegos
A lo largo de la historia, las personas han tendido a visualizar conceptos abstractos, haciéndolos más tangibles en el proceso. Desde el principio de los tiempos, los humanos solían explicar estos conceptos o ideas a través de diferentes dioses y diosas. El conocimiento y la sabiduría son algunos de los conceptos más abstractos, y se encuentran entre los rasgos más valorados y respetados, por lo que naturalmente muchas culturas tenían varias deidades asociadas a ellos. En este artículo, analizaremos algunas de las diosas de la sabiduría y el conocimiento más destacadas de todo el mundo.
En la antigua religión griega, Atenea era una diosa de la sabiduría, los oficios domésticos y la guerra, y la hija favorita de Zeus. Entre todos los dioses del Olimpo, era la más sabia, la más valiente y la más poderosa.
Según el mito, nació completamente crecida de la frente de Zeus, después de que éste se tragara a Metis, que estaba embarazada de Atenea. Como deidad virgen, no tuvo hijos ni se casó nunca. Se le atribuyen varios epítetos, como Pallas, que significa niña, Parthenos, que significa virgen, y Promachos, que significa de la guerra y se refiere a la guerra defensiva, patriótica y estratégica, más que al ataque.
Atenea diosa griega
De todos los dioses y diosas del Olimpo, Atenea era posiblemente una de las más fascinantes. Diosa de la guerra, la sabiduría y la artesanía, Atenea era conocida por sus muchas pasiones y habilidades que la hacían destacar frente a sus homólogas. Hija de Zeus, Atenea se hizo rápidamente conocida como una de las más valientes y sabias del panteón griego.
Atenea no era una diosa con la que se pudiera jugar, dada su trayectoria. No se privaba de mostrar todo su poder, y era muy venerada por ello. Se construyeron templos para honrarla y alabarla por su labor, ya que muchos de sus seguidores creían que al adorar a Atenea, ésta les recompensaría con los dones del sustento y el refugio. ¿Cuáles eran los mitos que rodeaban a Atenea y cómo era su culto?
Los orígenes de Atenea se pierden en la noche de los tiempos. Los primeros hallazgos sobre Atenea apuntan a que su origen fue el de una diosa egea que se encargaba de la artesanía y la protección del rey. Más tarde, hay pruebas de su representación en la cultura minoica, que puede verse en forma de figurillas de la diosa serpiente. En esta época, también se creía que Atenea era una diosa pájaro y tal vez parte pájaro. En concreto, se cree que era en parte búho, antes de optar más tarde por descartar sus características de búho en pos de una figura más humana.
Nombres de dioses griegos
Ella resume muchos de los regalos de los griegos a la cultura occidental, desde la filosofía hasta el aceite de oliva y el Partenón. Atenea, hija de Zeus, se unió a los olímpicos de forma dramática y figuró en muchos mitos fundacionales, incluso tomando parte activa en la guerra de Troya. Era la patrona de la ciudad de Atenas; su icónico Partenón era su santuario. Y como diosa de la sabiduría, la estrategia de la guerra y las artes y oficios (agricultura, navegación, hilado, tejido y costura), era uno de los dioses más importantes para los antiguos griegos.
Se dice que Atenea surgió completamente formada de la cabeza de Zeus, pero hay una historia de fondo. Uno de los muchos amores de Zeus era una oceánide llamada Metis. Cuando se quedó embarazada, el Rey de los Dioses recordó el peligro que supuso para su propio padre, Cronos, y a su vez, cómo Cronos se enfrentó a su padre Ouranos. Receloso de continuar el ciclo de parricidio, Zeus se tragó a su amante.
Pero Metis, en la oscuridad del interior de Zeus, siguió gestando a su hijo. Al cabo de un tiempo, el Rey de los Dioses cayó con un dolor de cabeza real. Llamando al dios herrero Hefesto (algunos mitos dicen que fue Prometeo), Zeus pidió que le abrieran la cabeza, con lo que surgió Atenea, de ojos grises, en su gloria.
Atenea: diosa de la guerra
Atenea[b] o Atenea,[c] a menudo con el epíteto Pallas,[d] es una antigua diosa griega asociada a la sabiduría, la guerra y la artesanía[1] que posteriormente se sincretizó con la diosa romana Minerva[4]. Atenea era considerada la patrona y protectora de varias ciudades de Grecia, en particular de la ciudad de Atenas, de la que probablemente recibió su nombre[5] El Partenón de la Acrópolis de Atenas está dedicado a ella. Sus principales símbolos son los búhos, los olivos, las serpientes y el Gorgoneion. En el arte, se la suele representar con un casco y una lanza en la mano.
Desde su origen como diosa del palacio egeo, Atenea estuvo estrechamente asociada a la ciudad. Se la conocía como Polias y Poliouchos (ambos derivados de polis, que significa “ciudad-estado”), y sus templos solían estar situados en la cima de la acrópolis fortificada en la parte central de la ciudad. El Partenón de la Acrópolis ateniense está dedicado a ella, junto con otros numerosos templos y monumentos. Como patrona de la artesanía y el tejido, Atenea era conocida como Ergane. También era una diosa guerrera, y se creía que dirigía a los soldados en la batalla como Atenea Promachos. Su principal fiesta en Atenas era la Panathenaia, que se celebraba durante el mes de Hekatombaion en pleno verano y era la fiesta más importante del calendario ateniense.
