Mi bebé tiene miedo de caminar
Dar los primeros pasos es uno de esos hitos mágicos: grábalo, fotografíalo, compártelo en las redes sociales o háblalo con quien quiera escucharlo. Pero antes, te explicamos cómo ayudar a tu bebé a caminar.
Es normal que los bebés se desarrollen a ritmos diferentes, y no suele haber nada de qué preocuparse. Cada bebé aprende sus habilidades de forma diferente. Algunos bebés gatean pronto y caminan tarde, otros gatean y luego caminan, y algunos no llegan a gatear del todo.
Hay que darles tiempo, incluso hasta los 18 meses, para que caminen con normalidad. Si caminan tarde, anímales a practicar todos los días y recuerda que no debes llevarles en brazos con demasiada frecuencia: a la larga les harás un favor a ellos (y a tu espalda).
Si ya has cumplido los 18 meses y tu bebé sigue sin mostrar signos de caminar, siempre puedes hablar con tu médico. Puede que te remita a un profesional capacitado para comprobar la postura, el tono muscular y los reflejos del bebé.
Si el bebé ha nacido prematuramente (antes de las 37 semanas de embarazo), su desarrollo será inferior al de su edad. Puede parecer que alcanza este y otros hitos “más tarde” que otros, pero en realidad está en el momento adecuado para su edad.
Señales de que el bebé caminará pronto
Los trastornos del equilibrio no son frecuentes en niños y adolescentes, pero pueden ocurrir más de lo que creemos. Los síntomas pueden pasar desapercibidos o achacarse a otra causa. Los niños con problemas de equilibrio pueden parecer torpes o descoordinados. Pueden tener problemas para caminar, montar en bicicleta, hacer las tareas escolares o jugar.
Algunos niños y adolescentes pueden tener sólo signos leves que apenas se notan, mientras que otros pueden tener síntomas más graves. Los niños muy pequeños pueden no ser capaces de describir cómo se sienten. Los niños mayores y los adolescentes pueden quejarse de sentirse mareados, aturdidos o desorientados.
Las personas con trastornos del equilibrio también pueden tener pérdida de audición u otros problemas auditivos. Los sonidos pueden parecer apagados, sobre todo cuando hay ruido de fondo. Los niños también pueden tener dolor de oídos, presión o “plenitud” en los oídos y acúfenos (zumbidos u otros sonidos como pitidos, zumbidos o zumbidos en los oídos).
En la escuela, los problemas de equilibrio pueden dificultar la memoria, la concentración, la atención y el seguimiento de las instrucciones. Es posible que los niños no puedan oír al profesor o concentrarse en la pizarra, la pantalla o las tareas. Los problemas de equilibrio también pueden dificultar las clases de gimnasia o los deportes.
Cómo enseñar a caminar al bebé a los 9 meses
Los padres suelen esperar dos grandes hitos en el desarrollo de su bebé: su primera palabra y aprender a andar. Pero caminar es algo realmente difícil y siempre hay algún que otro bache en el camino. Por eso, aunque es bueno animar a tu pequeño a probar nuevas habilidades, evita presionarle demasiado, ya que podría perder la confianza.
Es importante recordar que todos los bebés se desarrollan a ritmos diferentes y no debes preocuparte demasiado si tu pequeño va a su propio ritmo. Esto es especialmente cierto si tu bebé ha nacido prematuro.
El aprendizaje de nuevas habilidades físicas no es fácil para los bebés y a veces puede hacer que se alteren y lloren. Esto también puede ser difícil para ti, así que recuerda pedir apoyo a tu familia y amigos, o hablar con tu visitador médico o enfermera de familia para que te aconsejen.
Lo primero que deben hacer los bebés antes de aprender a caminar es aprender a equilibrarse. Es muy importante ayudarles a ganar fuerza y control para mantener la cabeza erguida, ya que su cabeza pesa mucho.
Entre los 4 y los 6 meses, tu bebé empezará a soportar parte del peso cuando lo apoyes. También notarás que con el tiempo empieza a doblar las piernas y a rebotar. Con el tiempo, será capaz de mantenerse de pie con sólo sostenerle las manos. No te preocupes si tu bebé dobla los dedos de los pies en esta etapa, es sólo para ayudar a su equilibrio.
Cómo animar al bebé a caminar sin cogerle de la mano
A medida que la movilidad de los niños mejora, también lo hace su capacidad para explorar donde antes no podían. Así que eche un vistazo a su casa y actualice las medidas de seguridad de su hijo para que estén a la altura de sus crecientes habilidades.
A los niños que están aprendiendo a caminar se les llama “niños pequeños” porque eso es exactamente lo que hacen: caminan a trompicones, manteniendo las piernas muy separadas y pareciendo dudar entre cada paso, sacudiéndose de un lado a otro mientras avanzan un pie y luego el siguiente.
Aproximadamente 6 meses después de dar sus primeros pasos, los niños desarrollan una marcha más madura, con las manos a los lados (en lugar de delante para mantener el equilibrio) y con los pies más juntos. También tienden a mover los pies de una forma que se parece más a la de caminar, pasando del talón a la punta.
Durante estos meses de práctica, la mayoría de los niños pequeños se dan unos cuantos golpes, pero esto forma parte del aprendizaje de la marcha. No puedes proteger a tu pequeño de todas las caídas, pero puedes reducir el riesgo de lesiones permitiendo la exploración sólo en zonas seguras (y lejos de muebles con esquinas afiladas y otros peligros).