Equilibrio en la economia del momento
La balanza de pagos es un estado estadístico que resume las transacciones de una economía con el resto del mundo. Más concretamente, registra todas las transacciones económicas de los residentes de una economía con los no residentes, cuando se produce un cambio de propiedad. En este contexto, un residente es una persona o empresa que está registrada en un país durante más de un año.
En un mundo cada vez más globalizado, en el que las barreras políticas, económicas y tecnológicas desaparecen rápidamente, la capacidad de un país para participar en la actividad global es un importante indicador de su rendimiento y competitividad.
Para seguir siendo competitivos, las relaciones comerciales de hoy en día van mucho más allá del tradicional intercambio de bienes y servicios con el exterior, como demuestra la creciente dependencia de las empresas de las fusiones, asociaciones, empresas conjuntas, acuerdos de licencia y otras formas de cooperación empresarial. El comercio exterior puede ser complementado o sustituido por la producción (y a menudo la venta) de bienes y servicios en países distintos del lugar donde se estableció por primera vez una empresa: este enfoque se conoce como inversión extranjera directa (IED), por la que la empresa en cuestión invierte para establecer una nueva planta/oficina, o bien, compra los activos existentes de una empresa extranjera. La IED es un tipo de inversión internacional en la que una entidad residente en una economía (el inversor directo) adquiere una participación duradera (al menos el 10 % del poder de voto) en una empresa que opera en otra economía.
Crecimiento económico equilibrado
Las estadísticas de la balanza de pagos registran las transacciones económicas entre residentes y no residentes. Proporcionan una serie de balances entre las entradas y salidas y muestran cómo se financian estos flujos de transacciones. La balanza de pagos es un importante conjunto de estadísticas macroeconómicas de un país, que describe sus relaciones económicas y financieras con el resto del mundo.
La balanza por cuenta corriente de un país como porcentaje de su producto interior bruto (PIB) es un importante indicador económico. Muestra si el país es exportador o importador neto y, por tanto, si necesita financiar un déficit por cuenta corriente o tiene un superávit financiero en la balanza de pagos. Poner la balanza por cuenta corriente en términos de PIB permite comprender la sostenibilidad de la balanza a largo plazo, en particular si el país registra déficits continuos.
La balanza de pagos es un marco que permite al usuario comprender cómo las cuentas individuales se equilibran e interactúan a nivel de la economía. Sin embargo, cada cuenta es una estadística económica importante en sí misma que proporciona al usuario información valiosa sobre su ámbito de actividad. En algunos casos, el tema tiene su propia metodología (armonizada con la de la balanza de pagos) y una amplia gama de estadísticas adicionales a nivel de detalle.
Ejemplos de balanza de pagos
En 2019, la economía de Uganda registró un crecimiento del PIB de aproximadamente el 6,3%. La expansión del sector de los servicios impulsó principalmente el impresionante crecimiento del país. Mientras que el aumento de los servicios fue del 7,6% de media, el desarrollo industrial se situó en el 6,2%, impulsado por la construcción y la minería. Sin embargo, la agricultura creció sólo un 3,8%. Con el aumento del gasto público en infraestructuras e inversiones de capital para aumentar el reciente descubrimiento de petróleo, es esencial señalar que la tasa de pobreza de Uganda se redujo durante las dos últimas décadas. A día de hoy, alrededor del 21,4% de la población ugandesa – aproximadamente 10 millones de personas – sigue viviendo por debajo del umbral de pobreza nacional. Según el Banco Africano de Desarrollo (2020), más de dos tercios de la población en edad de trabajar se dedican a la agricultura, y cuatro quintas partes de los trabajadores son por cuenta propia o trabajadores familiares colaboradores. Una quinta parte de estos trabajos tienen un empleo remunerado o son empleadores ellos mismos.
Invariablemente, a diferencia de muchos países africanos, Uganda está clasificada con bajo riesgo de endeudamiento. Se estima que la deuda alcanzó el 43,6% del PIB en 2019, frente al 25% en 2012, lo que suscita preocupación a medio plazo. Los préstamos se mantienen dentro de los límites del FMI, pero los riesgos han aumentado debido a los mayores costes del servicio de la deuda y de las inversiones en infraestructuras, ya que los gastos han crecido más rápido que los ingresos nacionales. El déficit se financia principalmente con préstamos externos, complementados con valores nacionales. El comercio minorista, la construcción y las telecomunicaciones han sido los principales motores económicos. Se espera que la inflación se mantenga por debajo del 5%, fortaleciendo la economía nacional.
Balanza comercial y balanza de pagos
La cuenta corriente es uno de los dos componentes de la balanza de pagos de un país, el otro es la cuenta de capital. Se compone de la balanza comercial (la diferencia entre el valor total de las exportaciones de bienes y servicios y el valor total de las importaciones de bienes y servicios), la renta neta de los factores (diferencia entre el rendimiento de las inversiones generadas por los ciudadanos en el extranjero y los pagos realizados a los inversores extranjeros en el país) y las transferencias netas de efectivo, donde todos estos elementos se miden en la moneda nacional.
Cuando la balanza por cuenta corriente de un país es positiva (también conocida como superávit), el país es un prestamista neto del resto del mundo. Cuando la balanza por cuenta corriente de un país es negativa (también conocida como déficit), el país es un prestatario neto del resto del mundo. La relación entre la balanza por cuenta corriente y el Producto Interior Bruto (o % del PIB) proporciona una indicación del nivel de competitividad internacional del país.
¿Busca previsiones? Las previsiones de FocusEconomics Consensus Forecasts cubren aproximadamente 30 indicadores macroeconómicos por país para un periodo de previsión de 5 años y previsiones trimestrales para las variables económicas más importantes. Obtenga los detalles.